En pleno corazón histórico de Altafulla, entre calles empedradas, descansa junto a las paredes del Castillo este antiguo convento. Habitaciones confortables. Patio interior con una piscina y terraza solarium.
Masía del siglo XIX con un jardín de 3,5 hectáreas. Cuenta con 4 suites y 4 dobles, tienen vista al mar o jardín y son acogedoras, amplias y llenas de pequeños detalles. Todas con una decoración moderna de buen gusto y de gran luminosidad. Piscinas exteriores.
La construcción del parador viene marcada por su origen de castillo que vigila la ciudad erigiéndose
desde lo alto. Cerca de las Cuevas de Benifalles, el Castillo de Miravet y el parque Port Aventura.